La Inmaculada Concepción

Apreciados hermanos:

La fiesta de la Inmaculada Concepción,  es una invitación a  mirar en ella un gran ejemplo para que busquemos y redescubramos a  su hijo en nuestras vidas.

Pidamos al Señor, a imagen de María, ser capaces de decir «Hágase» y salir de nuestra zona de confort para abrazar con pasión la buena nueva del «Emmanuel«.

María, madre y hermana nuestra en la fe nos enseña la verdadera lógica del Evangelio. Celebremos esta fiesta con gran alegría y devoción.

P. José Brutua Murillo.